24/04/2017
A DONDE EL HOMBRE NO LLEGA
Alex Burgos, jefe instructor de la Unidad Canina Operativa (UCO), imparte un curso de adiestramiento de perros para intervenciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Yang y Bruce son dos pastores belgas de la variedad groenendael (pelo largo negro) y malinois (pelo corto). El primero encontró ocultos en una maleta dos billetes de 50 euros y el segundo estupefacientes escondidos en una pantalón. Lo hicieron bajo la atenta mirada de Ales Burgos, jefe instructor internacional de la Unidad Canina Operativa (UCO K9), y 16 guías, guardias civiles y policías que participaron en un curso de adiestramiento impartido ayer en las instalaciones del centro canino Balucan, en Ibeas de Juarros.
La actividad se centraba en canes detectores, que se emplean en todo tipo de intervenciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, según explicó Burgos.
Buscan estupefacientes, explosivos, billetes de curso legal, localización de personas ocultas, rescates, cadáveres… Y es que, la labor de un perro puede ser clave en una intervención policial porque su capacidad olfativa es imposible que pueda tenerla un ser humano.
A modo de ejemplo, este especialista asegura que, en la investigación de un incendio que podría haber sido provocado, hay animales que pueden llegar a localizar tipos de sustancias acelerantes del fuego, como la gasolina, el queroseno o un disolvente, que las personas serían incapaces de distinguir. A partir de ahí se podría encontrar el indicio del fuego, por lo que la información que aportan estos perros es increíble.
La información que aportan es increíble; pueden hallar el indicio de un incendio que ha sido provocado.
Burgos subrayo que hay razas mas predispuestas que otras para las labores de detección. Si hay que hacer un levantamiento de minas o explosivos, el pastor belga es muy nervioso y habría que buscar otra más tranquila como el golden, señalo. Lo importante, en cualquier caso, es el vinculo que el perro crea con su guía y el trabajo diario de adiestramiento, que no debe medirse tanto en número de horas como en constancia.
No existe un tiempo fijado para saber cuando un animal está preparado para participar en un operativo. En este sentido, este especialista aseguro que primero hay que valorar el tipo de actuación que va a realizar y las características del animal: Si estamos hablando del registro de un vehículo, podría estar en seis meses, pero si el can tiene miedos o inseguridad del proceso se podría alargar.
Nacido en Cataluña, es la primera vez que imparte un curso en Burgos y, además de trabajar en España, el instructor de la UCO prepara a efectivos policiales de países latinoamericanos como Colombia o México. Su presencia ayer en Burgos atrajo a profesionales de distintos puntos de España, según explico Marco Renedo del centro Balucan, que ha promovido esta jornada en colaboración con la Asociación Unificadas de Guardias Civiles (AUGC) y el Sindicato de Policías Municipales de España.